Es uno de los oráculos más antiguos que se conocen y de las múltiples versiones respecto a su origen, la más probable es aquella que ubica su nacimiento en los márgenes del Mar Negro, desde donde se difundieron por toda Europa. Pertenecieron a moradores europeos de difícil e incierta identificación, pero cuyos rastros se encuentran en manuscritos germanos, celtas y en los más recientes de los vikingos.